Pep Guardiola, ese baluarte

El Barça de Pep Guardiola parece que empieza a carburar. Pep es el estandarte más puro del barcelonismo. Fue un caballero en el campo como jugador y lo sigue siendo como entrenador. Un ejemplo y una personalidad realmente fuera de lo común. Resumiendo, un señor. No incidiré más en el carisma de este hombre que fue capaz de liderar y echarse a la espalda a un "Dream Team", equipo de los sueños, que rozó la perfección en el imperio futbolístico internacional. Pero eso quedó en los anales de la historia como un capítulo inolvidable. Pep Guardiola ha vuelto, ahora como trainer. Pep era un ingeniero sobre el terreno de juego y un profeta capaz de adelantarse un instante en el tiempo y ver cómo y por dónde debía conducir a su equipo hacia el cancerbero enemigo, de forma además más que brillante. Si el de Santpedor es capaz de transmitir a sus muchachos la visión que él mismo tenía sobre el terreno de juego y éstos entienden su concepto del fútbol, este equipo, que cuenta además con jugadores de indiscutible calidad y categoría, va a ser francamente imparable en esta competencia recién iniciada. Tiempo al tiempo.